Hoy enfermé un poco de nostalgia
por lo significativo
y un poco también por las cosas insignificantes
que también tuvieron su lugar y su tiempo
Y los ojos me dolieron
por los parajes vistos y los imaginados
por las voces atrapadas
en los intersticios de la tarde
y por el silencio que la noche trajo después
Aquel silencio
en el que la ciudad
me confió
en secreto
su nombre
Aquel silencio que se hizo vida en mi boca
para conjurar al unísono la lluvia
y ser la tormenta que en la madrugada
desdibujó el trazado de las calles
borrando también las evidencias
de aquellos ayeres tan tempranos y breves
Y enfermé de nostalgia también
por todo lo vivido luego de aquel amanecer
en el que desperté por primera vez
en el lugar de las palabras
por lo significativo
y un poco también por las cosas insignificantes
que también tuvieron su lugar y su tiempo
Y los ojos me dolieron
por los parajes vistos y los imaginados
por las voces atrapadas
en los intersticios de la tarde
y por el silencio que la noche trajo después
Aquel silencio
en el que la ciudad
me confió
en secreto
su nombre
Aquel silencio que se hizo vida en mi boca
para conjurar al unísono la lluvia
y ser la tormenta que en la madrugada
desdibujó el trazado de las calles
borrando también las evidencias
de aquellos ayeres tan tempranos y breves
Y enfermé de nostalgia también
por todo lo vivido luego de aquel amanecer
en el que desperté por primera vez
en el lugar de las palabras
vi/2000 - ix/2023
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